De los mayores temores que podemos tener a la hora de alquilar nuestra casa, es el de encontrarnos con inquilino que no pague las mensualidades. Esto es algo que, desgraciadamente, le puede ocurrir a cualquiera de nosotros. La obligación de nuestros inquilinos es la de realizar el pago cada mes. Aun así, si nos encontramos en un primer momento con esta situación, debemos ser compresivos hasta cierto punto. El impago nunca es justificable. Por ello desde Dr. House queremos comentar qué hacer si te ves en esta situación tan escabrosa.
Lo primero que debemos hacer en estas situaciones, es ir a hablar con nuestro inquilino para que nos comunique qué es lo que está sucediendo y porque no está haciendo frente a las cuotas de alquiler. Si nos informa de que no puede sufragar los pagos, deberemos de ofrecerle un tiempo para que se ponga al día con lo que debe y busque otro sitio que pueda permitirse. Si se negase a pagar y abandonar la vivienda, deberíamos pasar a realizar otra serie de acciones.
Antes esta problemática, te recomendamos que solicites el apoyo de un asesor jurídico. Él te ayudará a interponer una demanda. Una vez que esta llegue a los juzgados, se le ofrecerá al inquilino un plazo para que abandone la vivienda y la posibilidad de ponerse al día con los pagos. En el caso de que rehusara, seguiría el procedimiento judicial en curso, pudiendo llegar al desahucio.
Actualmente, como media, se necesitan más de ocho meses para que se lleve a cabo el desahucio de una vivienda que se encuentre ocupada por un inquilino moroso. Los procesos son largos y pero, gracias a nuestro abogado, siempre estaremos informados de cómo se encuentra nuestro caso. Una vez que se decida la fecha para desahuciar la vivienda, recuperaremos por fin nuestra casa en el estado que sea. Llegados a este punto, deberás plantearte si te interesa continuar con la reclamación de la cantidad, dado que es posible que la persona puede declararse como insolvente y debas asumir los gastos de todo el proceso.